Velo de novia

19.04.2015 13:37

Velo de novia

El velo, después del vestido, es uno de los aspectos que más define tu apariencia de novia. Históricamente el velo se usaba para proteger a la novia de los espíritus malignos, pero actualmente se considera simplemente como un lindo adorno. Las novias de hoy pueden elegir el tipo de velo que deseen, pero es importante entender que el velo es solo un accesorio y como tal, es solo una parte de toda tu apariencia. Debes considerar cómo quedará con tu vestido, con la forma de tu cara y cuerpo, con el peinado y con el escenario de la boda.

Considera el estilo y el nivel de decoración de tu vestido. En general, si tienes un vestido simple puedes llevar un velo elaborado. Sin embargo, si el vestido tiene muchos detalles, a menudo lo más favorable es un velo simple. Solo en las bodas más formales, como las bodas reales, se tiende a combinar tanto un vestido con un velo elaborados.

Los vestidos de novia tienen gran variedad de estilos distintos y el velo tiene que combinar con el estilo escogido. Está el estilo clásico, que es el formal, simétrico y generalmente elaborado de algún modo. El estilo romántico posee un elemento de suavidad y generalmente incorpora mucha atención a los detalles. El estilo sofisticado es un estilo discreto, libre de detalles recargados y el estilo ecléctico es creativo con toques inesperados. Tienes que considerar todos estos factores cuando escojas tu velo: el largo, el ancho, el color, las capas y la decoración.

 

Tipos de velo

El velo corto o blusher cubre la cara de la novia y debe llegarle al hombro. Mide entre 55 y 65 centímetros de largo. En esta clasificación se encuentran los velos birdcage o rusos que están tan de moda.
 
El velo largo hasta el codo tiene una medida de unos 75 centímetros de largo y debe llegar hasta el codo o la cintura de la novia. Casi siempre se esconde detrás del recogido y baja por la espalda hasta la cintura. Se recomienda si tu vestido es corto y sencillo y para las ceremonias civiles, ya que no es tan “solemne” como los que vamos a ver ahora.

El velo largo hasta los dedos termina por debajo de la cintura y debe alcanzar las puntas de los dedos. La longitud dependerá de la altura de la novia, pero suele estar entre los 85 y 125 centímetros de largo. Es el que llevan casi todas las novias. Ideal para vestidos largos.

El velo tipo capa o cascada es más corto en la parte de delante y cae por los lados hasta la cintura. He leido que queda fenomenal en los vestidos sin tirantes (palabra de honor, escote corazón, etc…)

El velo capilla llega hasta el suelo y se extiende unos centímetros en el piso, por lo que hace efecto de cola. Genial si tu boda es de tarde.

El velo catedral es el más largo de todos: tiene un largo de 2 metros y medio. Se recomienda para bodas religiosas, ya que la solemnidad de este velo no encaja para nada en una ceremonia civil, salvo que quieras ir como una princesa.
 

 

Tipos de rostro

 
Ya hablamos con anterioridad de los tipos de rostro, ahora pasaremos a describir la imagen. Recuerda que hay que intentar llegar a las facciones ovaladas, que son las más equilibradas. 
 
  • Redonda: es recomendable usar un velo de novia que caiga por los bordes de la cara para que parezca más fina.
  • Alargada: velo que caiga por la espalda o un tipo ruso, con este último acortarás la longitud del rostro.
  • Corazón: podrías llevar un velo por detrás de la cabeza y doble, una de las capas debe llegar a la altura de la barbilla.
  • Cuadrada: usa velo largo para suavizar tus facciones.
  • Ovalada: cualquier tipo de velo te queará genial.

 

Tendencias 2015-2016

 
Los velos de novia de 2015 y 2016 incorporan algunas novedades que están arrasando entre las nuevas colecciones de complementos, como el velo corto. Corto estilo ruso, o incluso cortísimo como una cinta de tul bordado que cubra unicamente la zona de los ojos.
      
Las diademas ‘tocadas’ con flores en 3D que incorporan una redecilla estilo años 50. Las tiaras, las coronitas con incrustaciones o inlcuso los broches que se penden al cabello y que ejercen de fijador del tejido.
     
Los que se posan suavemente sobre el cabello, sin fijación aparente, y caen sobre el rostro de la novia, con un largo asimétrico, más corto por delante que por detrás. 

Los tejidos que esperamos más estén de moda: tul, desde luego, estructurado en un mínimo de dos capas para darle cuerpo a la pieza, aunque también encajes, sedas y satenes, al margen de las mantillas, que también tendrán su particular comeback.

Esperamos que este post os ayude con vuestra elección.